El día después

Ya ha pasado ese ansiado día en el que todas las ilusiones están impresas en un pequeño papel con cinco números,generalmente adornado con algún motivo navideño.Los que pueden se reúnen en torno al televisor esperando que unos inocentes niños canten el número que lleva. Y cuando ese número es cantado y vemos que no coincide con el nuestro,nos consolamos pensando que al menos tenemos salud,y que otra vez será.¡Qué mágico ese don que tenemos las personas llamado fe! Hasta en los momentos más difíciles nos da un poco de aliento para continuar adelante.Todos soñamos con la bolita que cae del bombo contenga nuestro número,que es a su vez nuestra ilusión.Y cuando descubrimos que no es,sonreimos despreocupados con una copita de licor en la mano brindando por la salud.¿No somos un poco hipócritas? ¿Confundimos la fe con la suerte? Son tantos los refranes contradictorios a ese respecto que la confusión crea dudas: "Quien espera desespera","La paciencia es madre de toda la ciencia","Quien calla otorga"
¿A cuál debemos hacer caso,esperamos para llorar desesperados,tenemos paciencia para conseguir lo que queremos? Las contradicciones nos rodean en nuestra vida cotidiana generando muchas dudas.Muchos creen que las personas buenas y bondadosas están destinadas a alcanzar retos que los demás no podrían ni imaginar,¿pero qué sucede cuando una de estas persona lo da todo,y sin recibir nada a cambio se ve solo y triste? ¿Qué fe le ayuda a continuar adelante? ¿Tienen cabida esas personas en nuetra sociedad,o están destinados a irse a lugares lejanos donde las personas que viven allí tienen menos esperanza e ilusión? A veces nos aferramos a un clavo ardiendo aún sabiendo que nos puede quemar para no perder la esperanza.En tiempos como los que vivimos,toda piedra hace pared,el problema,es que poco a poco se nos van acabando las piedras,e incluso algunos creen que es mejor lanzarlas llenos de ira contra las personas que creen responsables,que usarlas par un buen fin.Si todos tenemos la esperanza de que las cosas cambien y vayan a mejor,¿no habrá llegado la hora de dar ese paso hacia el cambio,si nosotros no damos el primer paso, quién lo hará? La sociedad evoluciona,el capitalismo,al igual que el comunismo en su día,ha tenido su momento de gloria,pero ha llegado a su fin.El capitalismo puro y duro ha muerto,el mundo necesita una nueva esperanza,ha llegado la hora de que los personajes ocultos en las sombras de la democracia depositen la fe en una nueva generación política,que esté dispuesta a luchar por todos sin tener en cuenta los ceros de sus cuentas corrientes.La evolución no se puede detener,pero hay que tener cojones para aceptarlo y alzar la voz aún a pesar de las críticas.Todos los comienzos son complicados,pero hay que empezar antes de que sea tarde,y la esperanza se convierta en una revolución sangrienta.A lo largo de los años ya han muerto demasiados por los ideales,evolucionemos,y convirtamos los puños en manos capaces de escribir nuevas ideas,de asumir nuevos retos,y de buscar soluciones.El día después es hoy,nunca mañana,porque pasado puede que ya no se pueda hacer nada.